EL DESTRUCTOR DE ALMAS
Fue más grande que Chávez, Durán le tenía miedo, rompió 13 quijadas y entró al Salón de la Fama
La leyenda del boxeo consiguió ser uno de los pugilistas más elogiados en la historia.Antes de que Julio César Chávez obtuviera su gran popularidad y fuera considerado el “Gran Campeón Mexicano”, había otro peleador que muchos lo consideran más grande que el sonorense, incluso Roberto “Manos de Piedra” Durán le tenía miedo por haber roto ya 13 quijadas, una marca que le valió para ser inducido al Salón de la Fama.
Dicha leyenda del boxeo se trata de José “Pipino” Cuevas, un campeón mexicano que conquistó el boxeo en la década de los años setenta y ochenta. A lo largo de su carrea obtuvo un récord de 35 victorias, 15 derrotas y 31 nocauts. Pese a tener varios descalabros en sus registros, el nacido en Santo Tomás de los Plátanos, Estado de México se ganó la fama de ser un pugilista demoledor.

Dentro de sus victimas por la vía del cloroformo, Pipino Cuevas consiguió romper 13 quijadas, algo que lo hacía ser evitado por muchos. De hecho, fue el propio Manos de Piedra Durán el que aseguró que el mexicano le causaba algo de miedo por su poderosa pegada, pero aun así lo confrontó y le ganó.
El 29 de enero de 1983, esto dentro del Sports Arena en Los Ángeles, California, el sucesor de Julio César Chávez y Manos de Piedra Durán protagonizaron una dura batalla. Aunque el púgil azteca era el favorito para salir con las manos en alto, el panameño sorprendió al mundo al mandarlo a la lona de manera fulminante en el cuarto asalto.
Pipino Cuevas y su asenso al Salón de la Fama
Pese a caer con varios grandes nombres del boxeo, el excampeón mundial welter consiguió ser catalogado uno de los mejores 50 peleadores de todos los tiempos por la revista The Ring Magazine. Asimismo, tras su retiro en 1989, Pipino Cuevas consiguió entrar al Salón de la Fama en 2002.

Además de este gran logro, Pipino Cuevas también consiguió ser el mexicano más joven en convertirse en campeón mundial. Su coronación se dio luego de vencer en el segundo asalto por la vía del KO a Ángel Espada en 1976 y quedarse con el título de la Asociación Mundial de Boxeo.